"Para lograr tus metas es importante poner interés, ser constante y tenaz"

Cesar Rosillon tiene discapacidad auditiva y estudia administración de negocios.

    
A pesar de que César Enrique Rosillon Romero tiene discapacidad auditiva, no necesita comunicarse a través del lenguaje de señas con un intérprete, porque habla con fluidez.

Su mamá se percató de que no escuchaba a los 8 meses de nacido, cuando se le cayó el tetero y no tuvo reacción alguna. El primer médico que lo atendió le mandó a hacer varios exámenes porque sospechaba que el niño tenía algún retraso mental y fue su abuela quien los alertó que tenía problemas de audición.

Según su familia, la dificultad de César Enrique para escuchar fue consecuencia de una mala práctica de los doctores que atendieron a su madre en el parto, quienes no realizaron a tiempo una transfusión, por la incompatibilidad sanguínea de sus progenitores. Su madre tenía el factor Rh negativo y su padre Rh positivo.

Este caraqueño nacido en San Bernardino sufrió de pérdida de la capacidad auditiva total. Aprendió la lectura Braille y leer los labios en el Instituto Venezolano de la Audición y el Lenguaje.

Sus deseos de superación lo impulsaron a pedirle a su familia que lo inscribiera en una escuela regular para continuar los estudios, pero su mamá le respondió con una negativa, por considerar que sería difícil para él adaptarse a un nuevo ambiente donde sería objeto de burlas.

Estas razones no fueron suficientes para el joven de 8 años quien acudió a su mejor aliada, su abuela, para que convenciera a su madre. “Mi gran apoyo siempre ha sido mi abuela, quien confiaba plenamente en mí por considerarme inquieto, inteligente y con determinación”.

Pese a las dificultades, César aprendió a hablar en el colegio Doctor Gutierrez Solis. “Al principio me dio mucho miedo por ser el único estudiante con una discapacidad, pero salí adelante con mi propio esfuerzo”.

Se graduó de bachiller gracias a la Misión Sucre y actualmente, paralelo a su trabajo, estudia Administración de Negocios en el Colegio Universitario de Caracas.

Desde hace 10 años labora como asistente administrativo de la División de Previsión Social del Ministerio del Trabajo. Para él no existen los límites. A los jóvenes les dice: “con voluntad puedes superarte”.


 Es divorciado, tiene tres hijas y una nieta quienes no padecen discapacidad auditiva. “Para lograr las metas es importante poner interés, ser constante y tenaz”, indicó Rosillon.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Principios Constitucionales Venezolanos que Regulan el Derecho a Informar y estar Informado

PFG Comunicación Social

Ejemplo Cultural: Municipio San diego Celebra el día de la Afrovenezolanidad